JUVENTUD CREADORA (II)

SI ME QUIEREN BUSCAR

Si me quieren buscar, 

estoy donde las golondrinas vuelan bajo,

donde beben las libélulas doradas,

donde los gavilanes planean en círculos

sobre las despavoridas perdices.

Yo soy de la tierra caliente

que se agrieta por la sed.

Yo soy del valle de los Alfileres,

de donde vuelven a brotar los olivos calcinados

sin una mano que los cuide.

Si me quieren buscar,

estoy echando la siesta en el monte de los lirios,

o en la solería de una ermita derruida,

Entre dos cumbres

que soplan romero, cañas y cardos borriqueros,

donde habitan caracoles y cabrillas,

donde se puede ver Venus.

Si me quieren buscar, 

estoy sentada en la ladera de los cerros

mirando embobada el trigo o los girasoles,

depende del tiempo,

escalando montañas sagradas,

pisando tumbas ignotas,

esquivando temerosa, pepinillos del diablo,

cortando el viento con una rama de anís o matalahúva

silbando una canción de amor

con una hoja de eucalipto entre los labios

o buscando las dos entradas de las madrigueras

que construyen con trabajo los conejos.

Si me quieres buscar,

estoy adornándome el pelo

con flores de manzanilla,

masticando vinagritos

ensimismada con los zapatitos del Niño Jesús

que crecen junto a los hormigueros.

Si me quieres buscar,

estoy allá, allá lejos,

donde se alegra mi alma.

Este poema de Inmaculada Rodríguez Mateos,  es uno de los que podemos encontrar en su primer poemario  Retablo de duelos, que ha presentado en la Biblioteca Pública Municipal.

Como recoge Sebas Abdala en el Proemio al Lector, la obra es "un compendio  de sensaciones, sentimientos y  emociones veraces puestas en una carga que te llega al alma, a todas las aristas que compongan tu espíritu". 

Inma se descubre como una joven llena de entusiasmo y valores para caminar por la senda de su vocación literaria en la que, con seguridad, se sentirá realizada para satisfacción de sus lectores y lectoras.